La carrera comenzó varios meses antes, dudando si me inscribía o no, por los meses que faltaban. Pero tenía que decidirme y así lo hice el 21 de Mayo pasado después de hablar con la organización, pues estaban cerrando las inscripciones. La realicé con un dorsal solidario a favor de la Fundación Llundain Haritz Berri.
El viernes 6, con Juana, Mª Carmen y Joan emprendimos la marcha a San Sebastián. A las siete de la tarde llegamos y fuimos directamente al Kursaal, donde estaba situada la Feria del Corredor y recogimos mi dorsal: el 7358. El tiempo ya no estaba muy bien que digamos.
El sábado no salí a correr porque llovía en Lasarte y hacía mucho viento, y así continuó casi toda la jornada.
Y llegó el día. A las 7 de la mañana ducha, estiramientos de espalda y desayuno - fruta y café -. Alas 8h.30 ya estaba en la estación para tomar el tren, "el topo", que me llevaría desde Lasarte-Oria, junto con unos cientos de corredores, hasta Irún-Hendaya, done unos autobuses nos llevaría a la zona de salida. Todo muy bien organizado, pero con frío, viento y lluvia intermitente hasta las 11 h. que salieron los primeros corredores. Yo salía en el grupo 4 a las 11 y 9'. A las 11 y 5' nos dirigimos todo el grupo a línea de salida y cuando faltaban 2' para la salida y ya me había quitado una camiseta de plástico que llevaba para protegerme de la lluvia y el viento, cayó una granizada que me dejó helado para toda la semana. Creo que la espalda entró en calor el pasado miércoles.
Bueno, pero después de todo esto comenzó una de las carreras que mas he vivido y que difícilmente olvidaré.
Comenzamos corriendo junto al río Bidasoa y cruzamos la ciudad de Irún, con unas calles muy animadas de público, y si nosotros nos mojábamos ellos, los ciudadanos (personas de todas las edades, muchas familias con niños) también, pero no por eso dejaban de animarnos. La primera dificultad orográfica la tuvimos en el kilómetro 8 en el alto de Gaintxurizketa, después comenzaría una zona de toboganes de carretera de Lezo, lo que suele llamarse terreno rompe piernas. Después, hasta llegar al Puerto de Pasajes todo el camino discurría en una recta, el único tramo sin público del recorrido y donde ya notaba que no iba demasiado bien. En este tramo me alcanzó Josep Maria, compañero con el que inicié la subida al Alto de Miracruz, con un final de fuerte subida en el que me quedé, me paré y durante 100 m. caminando recuperé el ritmo de respiración y entre los grito de ánimos del numerosísimo público que había a ambos lados del recorrido (parecía una etapa de final en alta de una vuelta ciclista donde casi no dejan pasar al ciclista, igual para todos los corredores, muy emocionante) inicié el último tramo y la bajada por las Avenidas Ategorrieta y de la Zurriola. Palacio de Congresos del Kursaal, Puente del Kursaal y Alameda del Boulevard. Mucho público, música, mucha animación y llegada a la Meta.
Acabé roto pero contento de poder hacerlo. Después de un tiempo lesionado ha sido duro, pero nunca tanto como para vosotros que como siempre habéis estado a mi lado.
Se me olvidaba, ya hace un año que corro con la "Camiseta de la Fundació" espero poder continuar luciéndola mucho tiempo.
Unas fotos a modo de recordatorio.
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