El
día amaneció frío, o al menos así lo sentía yo. Tomé café en
el primer bar a 1 km. del albergue. Poco después crucé un riachuelo
por un puente en restauración.
Al
subir una senda el tiempo cambió y mucho.
Pero
duró poco. Al pasar por Martiñán, aunque seguía haciendo fresco
ya no estaba tan nublado.
Después
llegué a Goiriz.
Y
más tarde a Vilalba.
Entre
caminos como el de la foto y pistas asfaltadas bastante planas
transcurrió la primera parte de la etapa.
A
partir de Villalba se hizo un poco más dura y con más asfalto y fui
completamente solo hasta llegar a Baamonde. Allí el albergue estaba
bastante bien, entre los mejores de los públicos.
Y
ya tenía hechos 41.8 kms. más.
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